Todos los datos que adelantamos en el párrafo primero de esta pieza aparecen en el informe RAP/DE/009/22, que acaba de publicar la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. La CNMC incluye en ese informe una Previsión de la Demanda para los años 2023, 2024 y 2025, y, en el marco de esa previsión, ahonda en tres ítems clave para la demanda futura: el autoconsumo, el vehículo eléctrico y la bomba de calor (más adelante entraremos a fondo en cada uno de ellos). Para empezar, la CNMC presenta las estimaciones sobre la evolución de la economía española en 2023, estimaciones que “anticipan –dice- un leve crecimiento que podría oscilar entre el 1,2% previsto por el Fondo Monetario Internacional y el 2,1% previsto por el Gobierno de España y la Unión Europea”. El resto de las previsiones que maneja la CNMC son las siguientes: +1,4% (Banco de España); +1,5% (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos); y +1,9% (Funcas, obra social de la asociación bancaria CECA).
Tras presentar las estimaciones sobre el crecimiento económico en la España de 2023, la CNMC repasa diversas estimaciones sobre la demanda. “En 2023 –concreta la Comisión-, se espera una leve recuperación de la demanda (+0,9%) en contraposición con la reducción de la demanda prevista para el cierre de 2022 (-1,4%)”. Pero la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia especifica más (ojo al dato sobre la demanda de la industria): “se estima que en 2023 se producirán incrementos tanto de la demanda de baja tensión como de la de alta tensión, si bien los incrementos de la demanda de alta tensión, asociados a consumos industriales, serán superiores a la media”.
Para estimar la demanda del bienio 2024-2025, la CNMC considera la evolución del consumo por sector de actividad, la penetración del vehículo eléctrico, las bombas de calor, la eficiencia energética y el autoconsumo para el periodo regulatorio 2024-2025.
La previsión de demanda asociada al consumo doméstico se ha estimado –explica la CNMC en su informe- teniendo en cuenta las previsiones del Instituto Nacional de Estadística. En particular, se ha considerado que el número de hogares aumentará anualmente durante 2023-2025, en promedio, un 1,1% en el subsistema peninsular, un 2,0% en el subsistema balear, un 1,8% en el subsistema canario, un 0,7% en el subsistema ceutí un 0,1% y un 0,2% en el subsistema melillense.
La Comisión estima que el número de suministros conectados en baja tensión con potencia contratada igual o inferior a 15 kW evolucionará de la misma manera que el número de hogares. Por lo que respecta a la potencia y el consumo medio de los puntos de suministro durante el periodo de previsión, la CNMC estima que se verá afectado por la penetración del vehículo eléctrico, las bombas de calor y las medidas de eficiencia energética que se implementarán en el periodo derivadas del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030.
La Comisión estima que “el descenso del consumo eléctrico a través de la red motivado por el incremento del autoconsumo y las medidas de eficiencia energética será parcialmente compensado por el aumento de la demanda por la penetración de las bombas de calor y el vehículo eléctrico”.
Qué dice la CNMC sobre el vehículo eléctrico en su informe
• El parque móvil de vehículos ligeros continuará creciendo hasta el año 2025 siendo el incremento decreciente durante el periodo de previsión motivado por la ganancia de cuota de mercado de la utilización de vehículo de uso compartido.
• Las matriculaciones crecerán a un ritmo constante durante el periodo. En particular, se ha mantenido el incremento registrado en el último ejercicio con información disponible, esto es el 2,1% en el subsistema peninsular, el 1,7% en el subsistema balear, el 2,3% en el subsistema canario, el 1,3% en el subsistema ceutí y el 2,7% en el subsistema melillense.
• La cuota anual de matriculaciones de vehículos ligeros eléctricos evoluciona según una distribución logística (curva S) en línea con lo contemplado en el «Informe de la comisión de expertos de transición energética» hasta alcanzar el 100% en 2050. La Comisión destaca en todo caso que, “entre otros factores, en la penetración del vehículo eléctrico las políticas específicas de las distintas Comunidades Autónomas tendrán gran impacto a la hora de fomentar la transición de un vehículo de motor de combustión a eléctrico”.
• La CNMC estima que en 2030 habrá alrededor de 2,3 millones de vehículos eléctricos, lo que supondría un 7% de los vehículos ligeros en 2030.
• Otra de las estimaciones apela a la distribución de los vehículos eléctricos: el 70% de los vehículos eléctricos –concreta la CNMC- serán turismos y el 30% ciclomotores o motocicletas, con una potencia de carga de 3,45 kW y 1,5 kW, respectivamente.
• El 50% de las cargas de los vehículos eléctricos –estima la CNMC- se realizará en horario nocturno y no supondrán por tanto un aumento de potencia y que el 50% restante se distribuyen homogéneamente durante el resto de las horas. Bajo estas hipótesis se estima que en 2025 habrá, aproximadamente, 570.000 vehículos eléctricos, lo que tendrá un impacto en la demanda consumida de 760 GWh y en la potencia contratada de 373 GW.
Qué dice la CNMC sobre las bombas de calor en su informe
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia estima que, anualmente, el 1,25% de los suministros con potencia inferior a quince kilovatios (15 kW) instalarán bombas de calor que cumplan con los requisitos de la Directiva (UE) 2018/2001, “de forma que el 18% de los hogares dispondrán de bomba de calor renovables en 2025, lo que, supuesto que el 50% se deberá a nuevos consumos y el 50% desplazará otros consumos eléctricos, tendrá un impacto en la demanda de 0,6 teravatios hora”.
¿Y del autoconsumo?
Respecto de la penetración del autoconsumo, la CNMC ha considerado que anualmente el 1% de los suministros con potencia inferior a 15 kW instalarán 1,7 kW de potencia fotovoltaica y se acogerá a autoconsumo, de forma que el autoconsumo representará el 6,5% del total de la demanda nacional en consumo en 2025.
Respecto de la penetración del autoconsumo en el sector no doméstico se han tomado las previsiones proporcionadas por las empresas. Cabe señalar que esta previsión no está detallada por tecnología, pudiendo incluir además de la solar fotovoltaica otras tecnologías.
El cuadro que aparece junto a estas líneas presenta las previsiones de la CNMC relativas a la demanda en consumo y en barras de central (b.c.), desagregadas por subsistema (peninsular, extrapeninsular) y distinguiendo entre la demanda suministrada desde las redes y demanda autogenerada, así como la evolución de las pérdidas medias previstas. “Cabe señalar –concluye la CNMC- que, si bien se estiman incrementos relevantes de la demanda nacional, motivado por el proceso de electrificación de la economía, estos incrementos no se traducen en incrementos de energía suministrada desde las redes, debido a la penetración del autoconsumo, que se estima alcanzará el 5,9% en 2025”.
Eficiencia energética
Respecto de las medidas de eficiencia energética se ha estimado que en el sector doméstico el tamaño medio de los suministros se reducirá un 5% anual como consecuencia de la renovación de los electrodomésticos. Asimismo, se ha considerado que la mejora de la eficiencia de los mismos y la tasa de renovación de los electrodomésticos es del 10% anual, supuesta una vida útil de 10 años.
Por otra parte, se estima que, en los años 2024 y 2025 se producirán incrementos de la demanda no doméstica en línea con las previsiones del crecimiento económico. En particular, se considera un crecimiento del PIB del 1,6% en 2024 y 2025.
A partir del 2024, se estima que la demanda asociada a los sectores químico, minero, alimentación, textil y calzado, energético transporte y resto presentarán incrementos en línea con las previsiones de crecimiento económico, parcialmente compensados por la adopción de medidas de eficiencia energética, mientras que la demanda industrial asociada a los sectores construcción, agricultura, metalúrgica, papelero, automovilístico y el sector servicios presentarán reducciones de demanda como consecuencia de la adopción de medidas de eficiencia energética y penetración del autoconsumo.
